Ciudadanía Italiana por descendencia: Nueva sentencia simplificaría el proceso de reconocimiento
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En una decisión histórica, el Tribunal de Casación de Italia, la máxima autoridad judicial del país, emitió la sentencia número 14194 el 22 de mayo de 2024. Esta sentencia representa un avance significativo en la simplificación del proceso de obtención de la ciudadanía italiana ius sanguinis, conocida también como ciudadanía italiana por descendencia.
El caso que llevó a esta decisión involucró a un descendiente de inmigrantes italianos que llegaron a América en el siglo XIX. Este solicitante enfrentó un gran desafío al intentar demostrar su filiación con sus ancestros italianos debido a la falta de un acta de nacimiento registrada en el sistema civil italiano. A pesar de contar con otros documentos históricos, como certificados de bautismo y matrimonio, junto con el resto de los requisitos y documentación requerida para la obtención de la ciudadanía italiana, las autoridades italianas habían rechazado su solicitud de ciudadanía, insistiendo en la necesidad de un acta de nacimiento civil.
Después de múltiples apelaciones y una larga batalla legal, el caso llegó al Tribunal de Casación. Los abogados del solicitante presentaron un argumento convincente basado en la realidad histórica y documental de muchas comunidades italianas emigradas, donde los registros civiles eran fragmentarios o inexistentes. El Tribunal, al reconocer estas circunstancias, dictó una sentencia que permite utilizar una variedad más amplia de documentos y testimonios para demostrar la filiación con ancestros italianos.
Motivos de la Sentencia
El Tribunal de Casación explicó que la exigencia estricta de un acta de nacimiento civil como única prueba de filiación es una barrera injusta para muchos descendientes de italianos, ya que la ley italiana establece un sistema de prueba de filiación con varios niveles, donde el acta de nacimiento es solo el primer paso.
El tribunal, basado en el Código Civil italiano, adopta un enfoque de prueba "flexible" para los casos en que el acta de nacimiento no esté disponible o pueda considerarse inválida según los estándares de la ley italiana (Circular K28), enfatizando que, si bien el acta de nacimiento es fundamental, no es el único medio de prueba de filiación, ya que en este sistema multinivel se contempla utilizar diversos documentos y testimonios que puedan probarla. Partiendo de esta premisa, reconoce la importancia de otros niveles de evidencia en el ordenamiento jurídico italiano para demostrar la relación paterno-filial y, por ende, la transmisión de la ciudadanía italiana.
Art. 236: "La filiación ((…)) se prueba con el acta de nacimiento inscrita en los registros del estado civil. Basta, en ausencia de este título, la posesión continua del estado de hijo ((…))".
Este artículo establece que la filiación o la relación legal de parentesco entre un hijo y sus padres, se prueba mediante el acta de nacimiento inscripta en los registros del estado civil. Sin embargo, para el caso en que no se disponga de este documento, se considera suficiente la posesión continua del estado de hijo, que implica una relación reconocida y mantenida consistentemente como tal dentro de la sociedad y la familia.
Art. 237: "La posesión de estado resulta de una serie de hechos que, en su conjunto, valen para demostrar las relaciones de filiación y parentesco entre una persona y la familia a la que pretende pertenecer. En cualquier caso, deben concurrir los siguientes hechos:
- Que el padre o la madre haya tratado a la persona como hijo y haya provisto, en esta calidad, al mantenimiento, la educación y el posicionamiento de esta.
- Que la persona haya sido constantemente considerada como tal en las relaciones sociales.
- Que haya sido reconocida en dicha calidad por la familia".
Este artículo se refiere en forma explícita a la evidencia continua y reconocida de la relación de filiación y parentesco entre una persona y una familia. Asimismo, el ordenamiento jurídico no restringe la admisibilidad de pruebas testimoniales ni de ningún otro medio probatorio válido, como se recoge el siguiente artículo del mismos código:
Art. 241: "Cuando faltan el acta de nacimiento y la posesión de estado, la prueba de la filiación puede darse en juicio por cualquier medio".
La corte destacó varios puntos clave en su razonamiento:
- Reconocimiento de la realidad histórica
En muchos países y épocas, especialmente durante los grandes movimientos migratorios del siglo XIX y principios del siglo XX, los registros civiles eran incompletos o no existían. La emigración masiva de italianos a América y otras partes del mundo a menudo implicaba que los registros oficiales se perdieran o nunca se crearan. - Diversidad de documentación
Documentos como certificados de bautismo, registros de matrimonio y defunciones, así como testimonios jurados y otros documentos históricos, son reconocidos como pruebas válidas para demostrar la filiación. Estos documentos, aunque no sean civiles, pueden proporcionar una prueba sustancial de la ascendencia italiana. - Justicia y equidad
La corte subrayó la necesidad de un enfoque más justo e inclusivo en el reconocimiento de la ciudadanía italiana, asegurando que las personas no sean descalificadas debido a la falta de un único tipo de documento que podría no haber existido en su contexto histórico.
Ventajas para los Solicitantes
- Mayor flexibilidad en la prueba de filiación
La sentencia elimina la exigencia exclusiva del acta de nacimiento de registro civil. Ahora se podrían presentar diversos documentos como partidas de bautismo, registros de matrimonio y defunciones, así como testimonios jurados. Esta flexibilidad permitiría a los solicitantes utilizar la documentación disponible y relevante para su caso específico. - Reconocimiento de contextos históricos y geográficos diversos
La corte reconoce que los registros civiles no siempre han sido completos o consistentes, especialmente en épocas pasadas y en países extranjeros. Esto significa que la falta de un acta de nacimiento no impediría demostrar la filiación con un ancestro italiano. Esta comprensión de los diferentes contextos históricos y geográficos es crucial para muchos solicitantes que enfrentan barreras documentales. - Simplificación del proceso de solicitud
Al permitir una gama más amplia de pruebas, se reduciría la complejidad y los obstáculos para demostrar la ascendencia italiana. Esto podría animar a más personas a solicitar la ciudadanía italiana por descendnecia ius sanguinis. Los solicitantes podrían ahora presentar un armado de legajo más robusto y variado, aumentando sus posibilidades de éxito. - Mayor justicia e inclusión
La decisión contribuye a reconstruir y reconocer las relaciones familiares, promoviendo un enfoque más justo e inclusivo para el reconocimiento de la ciudadanía italiana. Este enfoque inclusivo sería especialmente beneficioso para los descendientes de italianos en países donde los registros civiles son escasos o inexistentes. - Fomento del sentimiento de pertenencia
La sentencia refuerza el sentimiento de pertenencia y conexión con Italia para muchos descendientes de italianos en el extranjero, permitiéndoles reconectar con sus raíces y ejercer sus derechos como ciudadanos italianos.
La sentencia 14194 del Tribunal de Casación Italiano estaría marcando un hito en el reconocimiento de la ciudadanía italiana por descendencia o ius sanguinis, proporcionando una mayor flexibilidad y justicia para los descendientes de italianos.
Si bien esta sentencia estaría marcando un antes y después histórico en el proceso del reconocimiento de la ciudadanía italiana por descendencia, hay que tener en cuenta que la implementación y, especialmente, la ejecución de esta histórica sentencia por las autoridades italianas puede diferir y requerir tiempo y que es crucial consultar con un asesor especializado en ciudadanía italiana para analizar cada caso individualmente y determinar las pruebas necesarias, dado que aún quedan por resolver algunos aspectos, como el valor probatorio de ciertos documentos y la autenticidad de los testimonios.
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Fuente: Novecentoweb